Las enfermedades neuromusculares (ENM) son un conjunto de afecciones neurológicas, progresivas y crónicas, estas provocan una alteración de la fuerza muscular y la degeneración del conjunto de los músculos y/o nervios que la controlan.

Las causas de las ENM son muy diferentes. Incluso, en muchas enfermedades, no se conoce aún el origen pero se investiga activamente para determinarlo. La gran mayoría tiene un origen genético.

• Dificultad para caminar.
• Dificultad para moverse.
• Dificultad para agarrar objetos, como tasas, levantar los brazos, sentarse, pararse del suelo, entre otros.
• Disminución del volumen del músculo («Atrofia» = pérdida de volumen de la masa muscular).
• Aumento del volumen del músculo principalmente de la pantorrilla y al tocarlos no se sienten igual que otros músculos sino aguados. («Pseudohipertrofia» = aumento de tejido adiposo entre las fibras de músculo dando la apariencia como si tuviera más músculo).
• Problemas de la sensibilidad profunda y superficial, dolores.
• Pie cavo (El arco del pie esta muy marcado).

Aunque se están produciendo avances importantes gracias a la investigación, de momento los tratamientos existentes están orientados a controlar los síntomas y mejorar la calidad de vida. El tratamiento consiste en la administración de corticoides, inmunosupresores (para contrarrestar a los anticuerpos), enzimas que faltan o incluso terapia génica; dependiendo del diagnostico definitivo que tenga la persona.

No existen tratamientos que curen las ENM, sino que la mayoría se orientan a evitar dolores, contracturas y deformidades, así como mantener la función motora el mayor tiempo posible. También es necesario cuidar la función respiratoria y el estado nutricional.

Va a depender del tipo de ENM que presente la persona, pero habrá un grupo que necesite apoyo de otras personas para realizar las actividades básicas de la vida cotidiana; podrían requerir de asistencia con dispositivos como andadores, sillas de ruedas y aparatos ortopédicos para piernas y tobillos.

En la mayoría de los casos es necesario un tratamiento rehabilitador que permita mantener una postura adecuada y la función motora estable el mayor tiempo posible, así como evitar contracturas y deformidades.

La idea es mantener las funciones motoras el máximo tiempo posible, así como fortalecer la musculatura.